Setenta años de las fotos instantáneas

Probablemente suceda todos los minutos del día: una niña pide ver la foto que su padre acaba de sacarle. Hoy, gracias a los smartphones y las cámaras digitales, podemos ver instantáneas de inmediato, lo queramos o no. Pero en 1944, cuando Jennifer Land, de 3 años, pidió ver la foto de las vacaciones familiares que su padre acababa de tomar, la tecnología no existía. Entonces su padre, Edwin Land, la inventó.

Tres años más tarde, después de mucho desarrollo científico, Land y Polaroid Corporation se dieron cuenta del milagro que eran las imágenes casi instantáneas. La exposición de la película y el hardware de procesamiento estaban contenidos dentro de la cámara; no había ninguna dificultad para el fotógrafo que solo señalaba y disparaba y luego observaba cómo la imagen se materializaba en la foto una vez que salía de la cámara.

La cámara Polaroid se lanzó por primera vez al mercado en 1948. Pero este fue solo uno de los muchos adelantos tecnológicos que inventó y comercializó Land, la mayoría de los cuales se centraron en la luz y en cómo interactúa con los materiales. La tecnología utilizada para mostrar una película en 3D y los lentes que usamos en el cine fueron posibles gracias a Land. La cámara a bordo del avión espía Lockheed U-2, como aparece en la película Bridge of Spies, fue un producto de Land, como lo fueron incluso algunos aspectos de la mecánica del avión.

El primer avance en óptica de Land llegó cuando descubrió un método conveniente y asequible para controlar una de las propiedades fundamentales de la luz: la polarización. La mayoría de las fuentes de luz producen una mezcla de ondas con todas las diferentes propiedades físicas, como la longitud de onda y la amplitud de la vibración. La luz se considera polarizada si la amplitud varía de manera consistente y perpendicular a la dirección en la que viaja la onda. Con el material correcto para que pasen las ondas de luz, estas pueden rotarse en otro plano, ralentizarse o bloquearse. Los lentes 3D modernos funcionan porque un ojo recibe ondas de luz que vibran a lo largo del plano horizontal, mientras que el otro ojo recibe la luz que vibra a lo largo del plano vertical.

Land creó "polarizadores" en pequeños cristales incrustados en láminas de plástico para alterar el paso de la luz según su orientación en relación con las hileras de cristales. Su polarizador económico permitía filtrar la luz de forma fiable y práctica, de modo que solo podían pasar longitudes de onda con una orientación particular.

Land fundó Polaroid Corporation en 1937 para comercializar su nueva tecnología. Sus polarizadores de hoja encontraron aplicaciones que van desde la identificación de compuestos químicos hasta lentes de sol ajustables. Los filtros de polarización se convirtieron en estándar en la fotografía para reducir el deslumbramiento. Hoy en día, los principios de la luz polarizada se utilizan en la mayoría de las pantallas de computadoras y teléfonos celulares, para mejorar el contraste, disminuir el brillo e incluso activar o desactivar los píxeles individuales.

Antes de los días de la captura digital de datos de alta velocidad y las pantallas de alta resolución asequibles, o el uso de cintas de video, la fotografía Polaroid era el método elegido para obtener resultados en muchos laboratorios científicos. Los experimentos o pruebas médicas necesitaban una salida gráfica para la interpretación, a menudo de un osciloscopio analógico que representaba un cambio de voltaje o corriente a lo largo del tiempo. El osciloscopio fue lo suficientemente rápido como para capturar las características clave de los datos, pero registrar la salida para su posterior análisis fue un desafío antes de que llegara la cámara instantánea.

Durante décadas, los laboratorios de investigación y las instalaciones médicas han utilizado configuraciones que consisten en una cámara Polaroid y un equipo de montaje para recoger las señales eléctricas que se muestran en las pantallas del osciloscopio. Los tamaños de formato son menos deslumbrantes en comparación con las resoluciones digitales modernas, pero fueron revolucionarios en ese momento.

Las contribuciones de Land van más allá de patentar más de 500 innovaciones e inventar productos que compraron millones de personas. Su comprensión de la interacción de la luz y la materia promovió nuevas formas de caracterizar los productos químicos con luz polarizada. Y proporcionó ideas sobre el funcionamiento del sistema visual humano.

A pesar de su brillantez, Polaroid Corporation eventualmente se golpeó con tiempos difíciles en las décadas posteriores a su muerte en 1991. Polaroid no estaba preparada ya que todos los niveles del mercado de imágenes se volvieron digitales: desde fotógrafos de consumo hasta las imágenes médicas y ópticas que abandonaron la película y el procesamiento.

Pero en lugar de hundirse, Polaroid se reinventó con nuevos productos que podrían ayudar a producir el nuevo mundo de las imágenes digitales. Y en el caso de que la historia se repita, Polaroid y otros fabricantes de cámaras instantáneas disfrutan de una renovada popularidad entre las generaciones más jóvenes que no estuvieron expuestas a las versiones originales. Al igual que la pequeña Jennifer Land, mucha gente hoy todavía quiere una versión tangible de sus imágenes, en este momento.