En el último tiempo, el sarampión ha vuelto a ser motivo de preocupación en Europa, incluyendo España. Esta enfermedad, altamente contagiosa y que muchos consideraban prácticamente erradicada gracias a la vacunación, está experimentando un preocupante repunte en varios países del continente, poniendo en juego la salud de miles de personas.
El aumento de casos de sarampión en Europa se ha vinculado principalmente a una disminución en la cobertura de vacunación, especialmente con la vacuna triple vírica, que protege contra el sarampión, entre otras enfermedades. Se transmite con suma facilidad a través de la respiración, tos o estornudos de las personas infectadas, lo que pone de manifiesto la importancia de mantener altas tasas de inmunización en la población.
Pese a estos incidentes, la situación en España no es alarmante gracias a las elevadas tasas de vacunación contra el sarampión, especialmente con la vacuna triple vírica. José Gómez Rial, inmunólogo del Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela, subraya la importancia de esta cobertura: “Partimos de una gran confianza por parte de la población española, que siempre ha sido muy provacunas y siempre hemos tenido coberturas muy altas. Aunque sí que notamos que en los últimos años hay cierta relajación”.
Expertos como Marcos López Hoyos, presidente de la Sociedad Española de Inmunología (SEI), refuerzan este mensaje de calma y responsabilidad: “Afortunadamente, contamos con una tasa de vacunación muy elevada que sirve de barrera de defensa y evita la expansión en nuestro país”.
Esta alta tasa de inmunización actúa como un escudo protector contra la propagación del sarampión, incluso frente a casos importados o en personas con sistemas inmunológicos deprimidos.
África González, investigadora del Centro de Investigaciones Biomédicas de la Universidad de Vigo, recalca la solidez de la cobertura vacunal española y la compara favorablemente con otros países: “España tiene una muy buena cobertura vacunal de las dos dosis recomendadas, pero no es así en otros países, y puede haber casos importados o infección en personas con un sistema inmunitario deprimido si viajan a países donde no hay buena cobertura de vacunación”.
Además, González hace un llamado a la acción: “Por ahora no parece preocupante en España, ya que han sido brotes aislados, y es importante destacar que ha infectado a personas no vacunadas. Hay que llamar a la tranquilidad, pero también a la responsabilidad de que todas las familias vacunen a sus hijos, ya que les estarán protegiendo de una enfermedad que, aunque no lo creamos, puede ser grave”.
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