Hace aproximadamente 65 millones de años, durante el final del período geológico denominado "Cretácico", un meteorito de 10 kilómetros de diámetro se estrelló contra el planeta Tierra generando un cráter de 180 kilómetros de diámetro en el noroeste de la península del Yucatán, en México. El impacto tuvo como consecuencia la extinción masiva de los dinosaurios, la cual permitió el desarrollo y la expansión de los mamíferos, ese grupo de seres a los cuales pertenece la humanidad.
Las redes sociales de usuarios mexicanos se vieron desbordadas este 26 de mayo por imágenes que recordaron a muchos usuarios de Twitter ese relato sobre la extinción de los grandes reptiles. Las imágenes correspondían a un supuesto meteorito que surcó los cielos de Uruapán, ciudad ubicada en el estado mexicano de Michoacán.
Con el hashtag #meteorito era posible acceder a un montón de registros de una luz azulada en el cielo, así como a bromas de todo tipo al respecto del fenómeno. El mismo parecería haber ocurrido alrededor de las 21:45 horas, y según algunos usuarios el objeto luminoso también se podía apreciar desde otros estados de México como Querétaro y Jalisco.
Aunque las autoridades no se han manifestado al respecto con ninguna postura oficial, la Protección Civil del Estado de Michoacán confirmó la ocurrencia de fallos técnicos en los sistemas de telecomunicaciones después del incidente. Esta información podría corresponderse con el testimonio de varios ciudadanos que aseguran haber sentido una explosión y un temblor, posiblemente debidos al impacto del misterioso objeto.
La Universidad nacional Autónoma de México (UNAM) explicó por su lado en un comunicado que el fenómeno pudo deberse tanto a un meteoro como a basura espacial. Según El Heraldo de México, el especialista en astronomía Mario Rodríguez Martínez asegura que es muy probable que el objeto registrado por los usuarios de redes sociales sea un meteoroide. “Los asteroides al igual que los cometas forman parte de los remanentes del Sistema Solar que quedaron durante su proceso de formación. Cuando estos objetos ingresan a la atmósfera terrestre (lo que se conoce como meteoros), generan una estela de material luminoso y brillante en el cielo que en muchas de las ocasiones es perceptible desde la superficie terrestre”, dijo el mismo experto en el comunicado de la UNAM. En caso de no ser un meteoroide, el objeto sería entonces sencillamente basura espacial, “que son los remanentes de satélites que ya cumplieron su ciclo de servicio y que son llevados a órbitas más bajas para su desintegración en la atmósfera”, dijo Martínez.
Debido a que hace poco circularon imágenes de un objeto similar en los cielos de Australia y que la NASA había advertido la cercanía del asteroide 1999 KW4 a la Tierra desde el 20 de mayo, cabe cuestionarse si ambos fenómenos, los avistados en México y Australia, no estarían relacionados.
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