A la semana siguiente de terminar el Mundial FIFA 2014, donde Uruguay quedó eliminado en octavos de final, otro mundial comenzó en Brasil y esta vez la celeste se llevó la copa.
En el marco de la Robocup, el torneo internacional que desde 1997 fomenta la investigación, desarrollo y educación sobre robótica e inteligencia artificial, los adolescentes
Joaquim Silveira Francolino y Pedro Sales Rodríguez, de 14 años, ganaron en su categoría dentro de la liga de rescate, además de obtener el premio por innovación electrónica con su robot casero autónomo, es decir, que no usa controles remotos.
El objetivo de la liga de rescate es conseguir que el robot salve a alguien en un ambiente hostil. Mientras que en la vida real podría ser una persona atrapada en un incendio o derrumbe, en la competencia se trata de una lata en medio de un escenario con múltiples obstáculos.
Para el desafío, los adolescentes gastaron entre US$ 800 y 1.000 para crear el ahora premiado robot. La estructura se compone de bases de piezas Lego, mientras que lo que sería el “cerebro” de todos los sensores, que son 12 en total, está formado por un microcontrolador llamado Arduino Mega. Para poder llevar a cabo la misión también tiene dos ruedas oruga, como las de los tanques de guerra, y una pinza para agarrar la lata que precisa ser rescatada.
A través de su grupo de Facebook, llamado
Uruguay in Robocup, los adolescentes anunciaron: “Tenemos el honor y el orgullo de compartir con ustedes: ¡ganamos!”. Con la tutoría de Federico Andrade, docente de Facultad de Ingeniería de la Universidad de la República, Joaquim y Pedro consiguieron una victoria que lleva unos sietes meses de trabajo y unas jóvenes pero prometedoras vidas de pasión por la robótica.
Durante la semana en que se desarrolló la Robocup compitieron unas 3.000 personas de 45 países, distribuidas en más de 400 equipos. Además de la liga de rescate hay otras cuatro, incluida la de fútbol. El objetivo es que, en 2050, las máquinas se enfrenten a los campeones FIFA en una final mundial robots versus humanos.