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Un show sobre cocina es el último hit de Netflix
Food porn es un término con dos significados. En Estados Unidos, se le suele aplicar a la comida alta en grasa y poco saludable. Pero la expresión, que podría traducirse como “porno gastronómico”, también se refiera a la comida presentada en imágenes que estimulan los sentidos con formas sensuales, texturas palpables y primeros planos deliciosos.
Chef’s Table es una nueva serie de Netflix estrenada el 26 de abril y su presentación es deliciosamente pornográfica en términos gastronómicos. Se trata de un programa documental que busca retratar a seis de los más renombrados chefs del mundo.
Francis Mallmann, del restaurante Patagonia Sur, en Buenos Aires; Ben Shewry del restaurante Attica en Melbourne; Magnus Nilsson del restaurante Fäviken en Järpen, Suecia; Niki Nakayama, del restaurante N/Naka en Los Ángeles; Dan Barber del restaurante Blue Hill en Nueva York y Massimo Bottura del restaurante Osteria Francescana en Modena, Italia, son los talentos culinarios retratados por la serie cuyos episodios ya están disponibles en el servicio de streaming.
El gusto secreto
Chef’s Table fue creado por el estadounidense David Gelb. Nacido en Manhattan donde creció entre shows de Broadway y la primera ola de manga japonés traducido al inglés, el cineasta se hizo conocer por su documental Jiro Dreams of Sushi, sobre el maestro japonés Jiro Ono.
En Chef’s Table, la cámara de Gelb pretende desmitificar la creatividad de los seis “maestros de la cocina”. A través de las entrevistas realizadas a los chefs se quiere acercar al espectador hacia el funcionamiento de sus mentes a la hora de ingeniar una receta o crear el menú completo de un restaurante.
En el caso de Mallmann —quien en Uruguay ha instalado un restaurante en el pueblo Garzón, en Maldonado– el argentino comparte sus reflexiones personales sobre la profesión a la hora de preparar sus platos centrados en la carne. Los platos del chef bonaerense suelen ser cocinados a fuego lento sobre parrillas a nivel de la tierra, una impronta que le ha valido su estilo “rústico” que lo posicionó como uno de los mejores chefs del mundo.
“Educamos a los niños a que se conformen en una silla cómoda. Para crecer y mejor, hay que estar en el precipicio de la incertidumbre. Mi mensaje es salgan de su silla o de su sofá y salgan afuera”, expresa Mallman en un perfecto inglés en adelanto de Chef’s Table, que lo muestra cocinando en diferentes rincones de la Patagonia.
Con esas imágenes de Mallman y el resto de sus colegas alrededor del mundo, la serie asegura el deleite visual del espectador, así como las ganas de un segundo plato bajo la frase “un episodio más, por favor”
