El cargo de presidente de
Nintendo será ocupado por Tatsumi Kimishima. Es un hombre serio, dedicado y de bajo perfil, que nunca buscó ningún reconocimiento público por sus acciones. Su contribución a la esfera de los
videojuegos ya lleva varios años, durante los que ocupó diversos cargos como jefe financiero en The Pokémon Company, presidente de Nintendo Estados Unidos y hasta hace pocos días se encargaba de dirigir el departamento de Recursos humanos.
Aunque su perfil es mucho más ejecutivo que creativo, al contrario de como era su antecesor, el fallecido
Satoru Iwata, sus gestiones al frente de compañías de videojuegos han sido muy exitosas.
Posiblemente, Kimishima no tenga el carisma que muchos esperan para el próximo responsable de Nintendo, pero por su currículo parece que tiene lo necesario para triunfar. Sobriedad y mesura son sus principales virtudes, que lo posicionan como una de las personas más capaces para enfrentar el nuevo desafío: revitalizar la empresa Nintendo, cuyo modelo de negocios fue superado por los juegos gratuitos de sus competidores para dispositivos móviles y las ventas débiles de su consola Wii U.
A partir de ahora asumirá el reto; como a él le gusta, entre las sombras.