¿Qué esconde este cubo?

¿Qué es lo que ha motivado a cientos de miles de personas a querer destrozar un cubo virtual de 60 mil millones de piezas, que levita en un fondo blanco? La respuesta es simple: curiosidad. Y ese es, precisamente, el nombre con el que un equipo de veteranos de la industria de los videojuegos bautizó a su primera creación independiente, Curiosity. Aunque pronto extendieron el nombre con ¿Qué hay dentro del cubo?, para no generar confusiones con el rover de la NASA en Marte, la esencia del juego no se inmutó.

Liderados por el británico de 53 años, Peter Molyneux, ex trabajador de Microsoft, una veintena de diseñadores y desarrolladores de videjuegos formaron 22Cans, una empresa que busca revolucionar el mundo del entretenimiento digital.

El Cubo es su primer intento de sacudir la forma de jugar desde el smartphone. La premisa es simple y confía en la psicología humana, en las ganas de descubrir la verdad. O al menos algo que les "cambie la vida", como prometió Molyneux a Wired antes del lanzamiento del juego, hace una semana.

Actualmente, el videojuego Curiosity: ¿Qué hay dentro del cubo? puede descargarse de forma gratuita desde iTunes y Google Play.

Ese cubo azul

Un cubo azul oscuro flota en el aire sobre un fondo blanco. Está compuesto por millones de piezas. Pero la última es el gran premio, el motor de todo. Por eso, miles de personas luchan entre sí para quitar una a una las piezas del cubo, destruyéndolo. Se juega en simultáneo y también hay pequeñas recompensas cada vez que se quitan partes, ya que cada día el cubo devela otros contenidos, como un homenaje al creador de Super Mario, Shigeru Miyamoto. Pero solo una persona llegará a la pieza número uno.

Por eso el blog Applicate, de El Mundo, opinó que  más que un juego se trata de un experimento social. Una señal es el hecho de que en sus primeros días de vida los servidores del juego colapsaron: "Simplemente no anticipamos este nivel de curiosidad", explicó 22Cans en su cuenta de Facebook, al tiempo que solicitaba donaciones para solucionar el problema.

Reputación

Según El Mundo, Molyneux es conocido por no siempre cumplir lo que promete. Tal vez por eso el cubo está siendo un éxito y un fracaso al mimo tiempo. Sin embargo, cuando el afortunado logre llegar al corazón de esta forma azul y enigmática, el premio que  Molyneux anticipó dará a este juego otro significado. O tal vez no, porque la hipótesis se comprobó desde un principio y se confirma cada vez que el cubo se vuelve más pequeño.

Quizás su único significado sea poner a prueba a la curiosidad.