Un hombre se suicidó tomando mercurio: evalúan cómo enterrarlo por el riesgo de contaminación

El cuerpo se iba a enterrar en el cementerio municipal de Las Piedras. La mutualista del hombre avisó a la Intendencia de Canelones sobre la muerte, pero no le advirtió cómo había sido y los pormenores del caso. "El certificado de defunción decía muerte normal", dijo el Coordinador de Gabinete Institucional, Pedro Irigoin, a El Observador.

Sin embargo, antes de que la comuna recibiera el cuerpo, desde la empresa funeraria y Ambiente, avisaron que la muerte había sido por intoxicación de mercurio. 

Como todavía se debe activar el protocolo –con autorización judicial–, el entierro está en pausa y la madre del hombre, Olga Larralde, pide un lugar donde poder ir a "llevarle flores, a rezarle" a su hijo, que hoy no sabe "ni dónde está". "No sé nada de él", dijo a Telenoche, que informó que el hombre que se suicidó tenía 47 años.

Ante la falta de información sobre cómo proceder ante este caso, desde la Intendencia de Canelones presentaron un escrito en Fiscalía "alertando la situación". "Por la excepcionalidad del asunto y para desligarnos de responsabilidades", afirmó Irigoin.

Por otro lado, según el jerarca de la comuna canaria, actualmente el cuerpo está en una cámara de frío privada.

La historia del caso

El hombre, que ya tenía varios intentos de suicidio, tomó "una gran cantidad en mililitros, casi un vasito" de mercurio y "cursó una intoxicación muy grave", contó a El Observador, Alba Negrín, que lidera el Centro de Información y Asesoramiento Toxicológico (Ciat). 

Se trató de "un caso muy desafiante en todas las aristas" y "hubo que recurrir a asesoramiento internacional", porque además de que no hay precedentes de un caso así y este tipo de intoxicación "es muy rara", Uruguay firmó un convenio internacional para "eliminar el mercurio de los centros de salud" y el uso en aquellos casos en los que "se puede eliminar", explicó Negrín.

"El mercurio de los termómetros rotos, esfigmomanómetros rotos, eso está encapsulado. Se juntó y está en depósitos", continuó la especialista.

Entonces, se tuvo que actuar con el cuerpo del hombre de 47 años de acuerdo a ese convenio. 

Negrín dijo que el mercurio "es peligroso para el medio ambiente", pero "no para las personas que están alrededor ahora".

Señaló que "se tiene que enterrar en un ataúd especial de metal que seguramente hay que hacerlo construir y por eso no se ha podido enterrar a este señor".

Negrín sostuvo también que el ataúd no puede ser de los que se usan para "trasladar de un país a otro" porque "son galvanizados" y "este tiene que ser de acero".

La especialista dijo que después de que se generó el protocolo, "quedó en manos del Ministerio de Ambiente".

Sin embargo, autoridades de la cartera dijeron a El Observador que no conocían con profundidad el caso.

Por otro lado, desde el MSP añadieron que además de poner el cuerpo en un ataúd metálico, entre otras cosas, se debe hacer un tratamiento con azufre. Además, para la reducción, en el futuro, se deberá esperar cinco años.

Al momento se espera la aprobación –que está en trámites judiciales– de la jueza del caso para activar el protocolo.