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Pesca, patentes de vacunas y crisis alimentaria: los temas de una nueva cumbre de la OMC
La primera reunión ministerial de la Organización Mundial del Comercio (OMC) en más de cuatro años comenzó en Ginebra con la esperanza de que los 164 Estados miembros se pongan de acuerdo sobre la pesca, las patentes de las vacunas contra el covid y sobre cómo evitar una crisis alimentaria mundial. Sin embargo las diferencias siguen siendo grandes y el resultado incierto.
Desde el principio, la directora general de la OMC, Ngozi Okonjo-Iweala, se mostró "cautelosamente optimista" y con ambiciones limitadas. El camino "será caótico y puede haber algunas minas terrestres, tendremos que evitarlas", dijo Okonjo-Iweala, la primera mujer y la primera directora general de África, que lleva 15 meses al frente de la organización.
Como la OMC funciona por consenso, basta con la oposición de un miembro para echar por tierra una decisión. En los últimos años, la organización ha perdido relevancia por su incapacidad para alcanzar grandes acuerdos, en especial por el veto de los países del G7 en muchos temas, entre ellos la cuestión de las patentes medicinales en poder de los grandes laboratorios. El último acuerdo en el marco de la organización data de 2013 y en esta ocasión la cuestión más relevante es la crisis alimentaria mundial.
El proyecto de declaración ministerial promete "tomar medidas concretas" para facilitar el comercio y mejorar el funcionamiento de los mercados "incluidos los de cereales y fertilizantes". El texto, además, promete prestar especial atención a los países más pobres. En ese marco, el viceministro ruso Vladimir Ilichev pidió a sus colegas que analizaran la situación de la guerra entre Rusia y Ucrania en forma "objetiva y equilibrada" y prometió la participación "activa y responsable" de Moscú para "mejorar la situación del mercado mundial de alimentos".
Poco antes, más de 50 países, entre ellos los integrantes de la Unión Europea y Estados Unidos, reiteraron su solidaridad con Ucrania en presencia del representante comercial ucraniano, Taras Kachka, en una ceremonia y una declaración conjunta. El objetivo era también evitar que la guerra acapare el debate, sobre todo porque Rusia tiene poder de bloqueo. Según los analistas, difícilmente se alcance un acuerdo relevante.
La pesca sigue siendo un tema clave, en particular por el intento de suprimir las subvenciones que puedan fomentar la sobrepesca o la pesca ilegal. En los últimos meses se ha avanzado en disputas que antes parecían insuperables y también se ha rechazado la idea de que los conflictos territoriales, numerosos y muy delicados, se traten en la OMC. También se ha avanzado en la definición del mecanismo de tratamiento preferencial para los países en desarrollo. Sin embargo, India exige un periodo de exención de 25 años. Demasiado tiempo, dicen muchos miembros, que apuntan a 2030.
La intransigencia india, destacada por muchos diplomáticos, podría hacer descarrilar otros asuntos. En su primer discurso, el ministro de Comercio indio, Piyush Goyal, recordó que, en el ámbito de la agricultura, todavía no se han cumplido las promesas hechas a los países en desarrollo hace casi diez años. También subrayó que los derechos de los pescadores indios "no pueden limitarse de ninguna manera", recordando que corresponde "asumir sus responsabilidades” a los países que han vaciado los océanos a base de subvenciones.
También se espera que los ministros debatan sobre la pandemia, con dos textos en discusión, uno de ellos para permitir el levantamiento temporal de las patentes de las vacunas contra el covid-19. Se trata de un tema que divide y que la industria farmacéutica ve como un debilitamiento de la propiedad intelectual. Las oenegés, en cambio, creen que el texto no va lo suficientemente lejos para ser realmente eficaz. Un panorama de desacuerdos que, muy probablemente, confirme la irrelevancia que ha tenido la OMC en las discusiones globales durante la última década.
