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La princesa Leonor recibe el sable que representa el honor, el valor y la lealtad
La princesa Leonor recibió este martes de manos de un estudiante de segundo de la Academia General Militar de Zaragoza, donde se instruye desde agosto, el sable que simboliza que, al concluir su formación, se convertirá en oficial del Ejército.
En un acto a puerta cerrada celebrado a las 17.00 horas de este martes en las instalaciones de la AGM, la princesa Leonor y sus 600 compañeros de primer curso recibieron el sable de manos de alumnos del segundo curso.
El Palacio de la Zarzuela distribuyó imágenes en las que se puede ver cómo un alumno de segundo le entrega su sable a la Princesa. Es la Academia quien designa a los "padrinos" de primer curso, con quienes desde ese momento los jóvenes cadetes comienzan una relación estrecha. Se trata de una especie de tutelaje que perdurará de por vida, por alguien con quien tienes en común ciudad de nacimiento o inquietudes.
El general director, Manuel Pérez López, dedicó unas palabras a los cadetes formados en el patio central de la Academia y luego el miembro más antiguo de la promoción anterior a la de la Princesa leyó un texto explicando la importancia de este acto. "Con esta entrega, creamos unos lazos de unión para siempre", remarcó.
Los alumnos desfilaron al ritmo de distintas marchas militares por el centro del patio, donde se iban colocando en dos filas, enfrentando los de segundo a los de primero, y recibían el sable.
La dama cadete Borbón Ortiz y el resto de sus compañeros vestían el uniforme de diario con el cordón de cadete granate, y la boina grancé que recibieron la semana pasada tras superar unas duras pruebas de adiestramiento en varios campos de maniobras aledaños a Zaragoza.
En los dos meses que la Heredera lleva en la Academia --ingresó el pasado 17 de agosto--, es la tercera vez que se distribuyen fotografías de su vida allí.
La Princesa de Asturias se integró perfectamente a sus compañeros y a la vida castrense y se encuentra muy amparada por el resto de damas y caballeros cadetes y comparte camareta con otras chicas de su promoción.
A diario, los jóvenes pueden utilizar el teléfono para realizar una llamada a sus padres, salvo cuando están de maniobras, donde los móviles están prohibidos. También para Doña Leonor, que tiene el mismo régimen de permisos y guardias de sus compañeros.
Al recibir el sable, la Princesa de Asturias y sus compañeros hacen suyos el honor, el valor y la lealtad que implica esta distinción.
El próximo 7 de octubre Doña Leonor y el resto de sus compañeros jurarán bandera en una nueva ceremonia solemne, esta vez bajo la atenta mirada de sus progenitores y la prensa. Tras ese momento, la Heredera pasará a cursar asignaturas teóricas de segundo año hasta que termine el curso en verano, e ingrese entonces en la Armada en Marín.
