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La ONU prevé un calentamiento de 2,6°C para fin de siglo, “muy lejos” de los acuerdos firmados
A solo dos semanas del inicio de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27) que se realizará en la ciudad egipcia de Sharm El Sheikh, la Oficina de Cambio Climático de Naciones Unidas advirtió que los últimos compromisos internacionales están "muy lejos" de responder al objetivo del Acuerdo de París (2015) de limitar el calentamiento global a +1,5°C o +2ºC, los umbrales emblemáticos del tratado.
Según la oficina de la ONU, los planes vigentes para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero "podrían poner al mundo en la vía de un calentamiento de +2,5ºC para finales de siglo". El señalamiento es consecuencia de que solo 24 países, de los 193 firmantes en la COP26 realizada en Glasgow en 2021, han reforzado el compromiso de aumentar sus contribuciones a nivel nacional en forma anual, en lugar de cada cinco años como se preveía en el acuerdo de 2015.
“Es una cifra decepcionante", afirmó Simon Stiell, director de la agencia de la ONU. "Estamos muy lejos del nivel y de la velocidad de reducción de emisiones necesarios para ponernos en el camino hacia un mundo de +1,5ºC de aumento máximo de la temperatura”, destacó en un comentario escrito.
"Para mantener vivo el objetivo, los gobiernos deben reforzar sus planes ahora y aplicarlos en los próximos ocho años", insistió Stiell. Declaración en línea con lo afirmado por el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, quien consideró en declaraciones a la cadena británica BBC que el planeta se dirige hacia una evolución "catastrófica" y que solo quedarían “dos o tres años para cambiar la trayectoria".
Según los expertos de la ONU, las emisiones mundiales deben disminuir un 45% para 2030 con respecto a los niveles de 2010. Esto permitiría cumplir la meta fijada con relación a las temperaturas medias de la era preindustrial, cuando la humanidad comenzó a utilizar masivamente los combustibles fósiles que producen los gases de efecto invernadero responsables del calentamiento.
Según los expertos de la ONU, los compromisos actuales conducirían, por el contrario, a un aumento del 10,6% de las emisiones durante la próxima década, en momentos en que la concentración de metano aumentó hasta llegar a niveles récord en la atmósfera el año pasado, al igual que el dióxido de carbono y el óxido de nitrógeno, según informó la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
Por su parte, y en un estudio separado sobre las estrategias de largo plazo hacia la "neutralidad de carbono", la ONU calculó que las emisiones de los países que han adoptado tales planes podrían disminuir un 68% si realmente se aplican, aunque advirtió que "muchas" de esos planes son "inciertos" y “sin aplicación concreta”.
"La COP27 es una oportunidad para que los líderes mundiales revitalicen la lucha contra el cambio climático", destacó Stiell, quien hizo un llamado para que los países pasen “de las negociaciones a la aplicación y avancen “hacia las profundas transformaciones que deben producirse en todos los sectores ante la urgencia climática".
"Los compromisos de neutralidad de carbono no valen nada sin planes, políticas y acciones que los respalden", insistió Guterres a ocho días de la COP27, a la que han confirmado su asistencia el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, además de otros líderes de todo el mundo, conferencia en la que se evaluará el cumplimiento del Acuerdo de París.
En 2020, las emisiones globales cayeron un 7% en sintonía con el nivel estimado que puede mantener el calentamiento global en +1,5°C, debido a que la crisis de la Covid-19 paralizó gran parte de la actividad mundial. Sin embargo, el repunte de la actividad económica a nivel mundial registrado en 2021 podría consolidarse y llevar a que este año se alcance un nuevo y dramático récord en términos de emisiones, según advirtió la agencia climática de la ONU.
