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La familia real de vacaciones en Mallorca: visitaron los jardines de Alfabia
Los reyes y sus hijas aparecieron por primera vez públicamente este lunes tras su llegada a Mallorca para pasar unos días de vacaciones, durante una visita a los jardines de Alfabia, una de las fincas más antiguas de la isla, de origen árabe y ubicada en plena Sierra de Tramuntana.
En su habitual excursión veraniega, la familia real quiso conocer el que se considera uno de los jardines históricos más atractivos de España por su variedad de árboles y plantas y por sus juegos de aguas y estanques.
Los reyes Felipe VI y Letizia, la princesa Leonor y la infanta Sofía llegaron pasadas las 20 horas a la finca de la localidad de Bunyola, a unos 20 kilómetros de Palma, que es propiedad de la renombrada familia Zaforteza, cuyos integrantes de varias generaciones dieron la bienvenida a sus invitados.
Fue en ese momento el que eligieron para posar ante los fotógrafos tras subir una larga escalinata empedrada y con palmeras a ambos lados.
Felipe VI llegó a Palma el pasado miércoles, mientras que la reina y sus hijas lo hicieron este sábado por la tarde. El rey se dedicó esos días a navegar y Letizia asistió en la noche del domingo a la clausura del festival de cine Atlántida, por lo que el protagonismo de la visita de este lunes se centró en la princesa y su hermana en su primera aparición en Mallorca.
La Alfabia, que significa 'tinaja' en árabe, es una finca declarada Bien de Interés Cultural, acoge eventos y rodajes y está abierta a los turistas entre marzo y octubre.
La familia real hizo un recorrido por los jardines, donde sobresale su pérgola flanqueada por 72 columnas y 24 esculturas de piedra convertidas en surtidores cuyos chorros dibujan arcos de agua al cruzarse.
También visitaron la casona, decorada con variados estilos, árabe, gótico, renacentista o barroco, por las distintas reformas que se fueron realizando y presidida por un patio empedrado en el que destacan un gran plátano de sombra y una fuente en el centro.
Dentro de la casa, destaca el Cuarto de la Reina, en honor a la visita que hizo Isabel II en 1860 y a la que también se le dedicó uno de los espacios más vistosos.
De su etapa musulmana, se encuentran vestigios como los escudos de las familias árabes que residieron en la finca o un friso en el que puede leerse: "Alá es grande. El poder es de Alá. No hay más Dios que Alá".
