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Cuántas horas duermen los perros y qué tener en cuenta para controlar la salud de su sueño
En la vida cotidiana, nuestros perros no solo nos dan lealtad y alegría, sino que también nos brindan la oportunidad vivir una vida plena, con compañía fiel. Pero si alguna vez tuviste o tienes una mascota como estas, seguro te has preguntado cuántas horas pueden dormir, para que no pase a ser peligroso para su salud.
Entonces, ¿alguna vez te has preguntado cuántas horas duermen los perros? Descubre todo lo que necesitas saber sobre el sueño canino y cómo asegurarte de que tu mascota esté descansando lo suficiente para mantenerse saludable y feliz.
Información canina: cuántas horas puede dormir un perro
Según estudios y estadísticas especializadas, los perros pasan aproximadamente el 80% del día en una posición tumbada o acostada, pero no todas estas horas se dedican al sueño. Se estima que duermen alrededor de 12 horas al día, mientras que el resto del tiempo lo pasan simplemente descansando.
Durante estas horas de sueño, la mayoría del tiempo están en lo que se conoce como fase de sueño de onda lenta, caracterizada por una respiración y ritmo cardíaco más lentos. La fase de sueño profundo, donde pueden experimentar movimientos y ladridos, dura unas 4 o 5 horas.
Qué factores son importantes para entender cuánto puede dormir un perro
Varios factores influyen en las horas de sueño de un perro, siendo la raza uno de los más destacados:
Raza: los mastines y los San Bernardo, pueden dormir hasta 18 horas al día, por ejemplo. Los mastines, conocidos por su carácter noble y tranquilo, son propensos a largas siestas debido a su temperamento relajado. Por otro lado, los San Bernardo, a pesar de su apariencia imponente, son mascotas cariñosas que disfrutan del sueño prolongado para recargar energías.
Edad: similar a los humanos, los perros experimentan cambios en sus patrones de sueño a lo largo de su vida. Los cachorros, en su etapa de crecimiento y desarrollo, necesitan más horas de sueño para fortalecer sus cuerpos en crecimiento. A medida que envejecen, es natural que los perros se vuelvan más dormilones, reflejando una menor actividad física y un metabolismo más lento.
Ejercicio físico: el nivel de actividad física tiene un impacto directo en la cantidad de sueño que un perro necesita. Los perros que disfrutan de juegos y ejercicios vigorosos durante el día tienden a dormir más para recuperarse y reparar sus cuerpos. Por el contrario, los perros con un estilo de vida más sedentario pueden dormir más por inactividad que por necesidad fisiológica.
Condiciones medioambientales: los cambios estacionales y las condiciones climáticas pueden influir en los hábitos de sueño de un perro. Por lo general, los perros tienden a dormir más durante los meses fríos, buscando calor y comodidad en sus entornos. En verano, prefieren pasar tiempo al aire libre, adaptándose a las temperaturas más cálidas y disfrutando del sol.
