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10 integrantes: Policía detectó presencia del poderoso PCC en cuatro departamentos del país
La Policía detectó la presencia del Primer Comando Capital (PCC), la organización criminal brasileña que es una de las más poderosas de la región, en los departamentos fronterizos de Artigas, Rivera, Cerro Largo y Rocha, informó La Diaria.
Así lo indica un documento sobre los "grupos delictivos identificados por las unidades de la Dirección de Investigaciones de la Policía Nacional" del año pasado al que también accedió El Observador.
"En base a tareas operativas y de análisis, se han identificado por parte de las unidades dependientes de la Dirección de Investigaciones de la Policía Nacional 59 grupos delictivos que operan en territorio nacional, habiendo sido 46 de estos grupos identificados por la Dirección General de Represión al Tráfico Ilícito de Drogas, 6 identificadas por otras unidades y 7 identificados que operan en zonas fronterizas con Brasil", dice el texto.
Entre los detectados en la frontera con Brasil se encuentra el PCC, con un líder en Uruguay llamado Diego Fernando De La Vega Hernández, que también es señalado como líder del grupo presente en Rivera: "Os Cría Da Fronteira".
El documento señala que se confirmaron diez integrantes del PCC en el país. "Los miembros se encuentran recluidos por delitos de narcotráfico y derivados, rapiña, homicidio, hurtos, etc", añade.
En cuanto a las zonas fronterizas donde se detectó actividad, se especifican: "Artigas - Quaraí / Rivera – Livramento / Río Branco - Yaguarón / Chuy - Chuí".
Como contó el actual asesor del Ministerio del Interior, Diego Sanjurjo, en una nota para El Observador en 2019: "El Primer Comando Capital (PCC) es la organización criminal más poderosa de Brasil. Está presente en la mayor parte de los estados y desde 2010 viene expandiendo sus operaciones en el extranjero, tanto en América Latina como en Europa y Asia".
"Su origen se remonta a la masacre de Carandiru en 1992, en la que las fuerzas de seguridad brasileñas mataron a más de 100 presos durante un motín. Tanto el PCC como el Comando Vermelho (CV) –la otra gran facción criminal brasileña– se formaron inicialmente para reclamar justicia por la masacre y para defenderse mutuamente en un sistema penitenciario particularmente violento. Desde entonces, ambas organizaciones han librado una sangrienta batalla por el control criminal del país", continuaba Sanjurjo.
