¿Tabárez vuelve al enganche? Una interrogante de cara al Mundial

Una tarde del mes de mayo de 2008 el técnico de la selección se encontró con Nacho González en el aeropuerto de San Pablo. Luego de los saludos de rigor, Oscar Tabárez le hizo una sugerencia a uno de los jugadores que formaba parte del proceso.

"Le dije a Nacho, 'vos no solo tenés que preocuparte por jugar bien la pelota, sino que tenés que ser el abanderado del juego de la pelota'. Y le dijimos que no pierda el ritmo. 'Jugá de 5 en las prácticas, sacrificate, hacé más de lo que te exige este medio porque lo vas a necesitar'. Él es un jugador inteligente, pero hay que ayudarlo a mirar lejos", reveló Tabárez.

Eran tiempos donde el Maestro buscaba la figura del 10 en su equipo. Tiempo después, con Nacho sin la continuidad necesaria, la idea fue mutando. Por eso el pedido a Nacho. Para que, a su juego, la agregara otros condimentos como la marca para tratar de reformular su posición en el campo.

El técnico no encontró la figura del 10 en su plantel y modificó la idea. Justo es decirlo que el 10 es una especie en extinción.

Y por estas horas, donde el entrenador realiza distintos ensayos que le permitan obtener conclusiones de cara al Mundial, comenzó a trabajar con la figura del enganche en el equipo.

Entonces las dudas surgen porque hay al menos tres hombres para la referida posición y para cumplir determinado rol en el equipo.

Giorgian De Arrascaeta, Gastón Ramírez y Nicolás Lodeiro parecen pelear por ese lugar.

Los tres tienen características y experiencias diferentes. Lodeiro por ejemplo jugó de doble 5. Con el propio Tabárez.

Hay que remontarse el año 2013 para encontrar la figura de un enganche en el equipo.

Gastón Ramírez cumplió la función en varios partidos de las eliminatorias y en el inicio de la Copa Confederaciones.

Con anterioridad la tarea fue destinada a Nico Lodeiro hasta que el Maestro lo reubicó como doble 5 al lado de Arévalo Ríos.

La figura del 10 clásico desapareció con la salida de Nacho González.

Se podría afirmar que ya casi no quedan equipos en el mundo con un 10 clásico. Hoy se requiere de otras cosas para jugar.

Lo cierto es que la selección también modificó su postura en la cancha. Pasó de un 4-3-3 donde quedaba claramente establecido el rol del 10, al 4-4-2 donde jugaba Cavani volanteando y Suárez con Forlán por delante. En algunos partidos fue Diego el que asumió la tarea de la elaboración de juego.

Pero de un tiempo a esta parte el técnico se ha reiterado en parar el equipo con dos volantes por adentro y dos por afuera.

Y fijese las diferencias: mientras en Peñarol el Cebolla juega como doble 5, metido por adentro; en la selección va de volante bien abierto por izquierda.

El hecho es que Tabárez comenzó a mover piezas en el medio buscando la figura del enganche. Primero probó con Gastón Ramírez, luego con De Arrascaeta (que incluso actuó por banda) y Lodeiro. Lo que parece claro es que lugar para los tres no hay. Y hay quienes piensan que de los tres va uno solo.

Un jugador del paladar del cuerpo técnico que cuando estuvo bien fue convocado. Ramírez aportó mucho en las eliminatorias en partidos complicados cuando se consideró necesario tener la pelota. Buen asistidor. Juega por detrás de los delanteros pero lentamente fue sumando sacrificio a su juego. Es que el menos siente la marca. Reveló que en su club jugó algunos partidos de doble 5.

Jugador de la generación que jugó la final del Mundial sub 20 en 2013. Se caracterizaba por jugar como enganche o doble punta. En su club, Cruzeiro de Belo Horizonte, juega libre por detrás de los delanteros. En los últimos amistosos de la selección el técnico Tabárez lo ubicó jugando como volante por afuera por la izquierda, donde debió tomar más precauciones defensivas.

Lodeiro tiene la experiencia de haber vivido dos mundiales. En el primero se fracturó. El volante pelea su lugar en el plantel con Ramírez y De Arrascaeta. A diferencia de sus compañeros, demostró que puede jugar y cumplir la función de doble 5. Lodeiro aportó a su juego cosas que no tenía cuando comenzó en Nacional, donde era un media punta.