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"Broken Age", el regreso de un grande
Tim Schafer, héroe de las aventuras gráficas de empresas como Lucas Arts en los años de 1990, vuelve a la creación de juegos con una aventura en distintos niveles llenos de ingenio y risas
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26 de enero de 2014 a las 12:00
El nombre de Tim Schafer viene haciendo eco en el mundo de los videojuegos hace ya más de 20 años gracias a títulos míticos que marcaron la vida de aquellos que hoy tienen cerca de 30 años y usaban PC para jugar. Él fue el hombre tras juegos como Monkey Island, Day of the Tentacle, Grim Fandango y algunos juegos más recientes como Psychonauts, Brütal Legend y Costume Quest.
Schafer, considerado uno de los padres del abandonado género de la aventura gráfica, vuelve para estampar su nombre nuevamente con un excelente videojuego al estilo de la vieja escuela, llamado Broken Age.
Surgido desde un mar de juegos colapsado de soldados y zombies donde el detalle gráfico llevado al realismo es lo que más vende, Broken Age hizo su carrera desde la nada como proyecto buscando financiación a través de Kickstarter. Double Fine, la empresa creada por Schafer en 2000, llevó adelante el proyecto y en tan solo pocos días completó su meta de US$ 400 mil para en un mes sobrepasar los 3 millones gracias a la financiación de los inversores.
Shay y Velouria son los dos protagonistas de esta aventura que respeta el viejo estilo del “point-and-click”. En ella, Shay es un adolescente hambriento de aventura que vive en el espacio en una nave que cree ser su madre y que en pos de su crianza segura lo envía en misiones inofensivas, lo alimenta y hasta lo entretiene. Pero él busca algo más. Velouria –o Vella– es una jovencita residente de un pueblo pastelero llamado Villa Sacarosa. Al igual que en muchos otros pueblos, allí se rinde tributo a Mog Chothra, una criatura de pesadillas a la cual se sacrifican las chicas más virtuosas de cada región. Al contrario de lo que piensa todo el mundo, Vella no considera esto ningún honor y cree que lo más sensato sería derrotarlo para siempre.
Bajo estas dos premisas es que comienza una historia con detalles de humor y drama, algo típico de Schafer. Intercalando entre un espacio-tiempo y otro, el jugador deberá enfrentar los clásicos retos de un juego de aventura gráfica de la vieja escuela: acertijos, puzles, enigmas y, por supuesto, las humorísticas y confusas conversaciones con personajes secundarios, otra marca registrada del género, y de Schafer.
Cabe destacar que las voces están únicamente en inglés pero los subtítulos al español son posibles y, aunque algún chiste o juego de palabras se pierda en la traducción, el humor está latente en cada conversación y situación del juego. Voces como las de Elijah Wood, Jack Black o Wil Wheaton dan vida a algunos de los personajes y quien no necesite de las traducciones encontrará la ventaja de disfrutarlos.
Broken Age está dividido en dos episodios basados en el humor y las risas, pero donde el suspenso y el misterio se colará detrás de intenciones escondidas, situaciones extrañas y, sobre todo, personajes secundarios multifacéticos.
Al igual que en los juegos del recordado Guybrush Threepwood (el protagonista de la saga Monkey Island), tanto Shay como Vella se moverán dentro del escenario caminando de aquí para allá interactuando con el entorno y manipulando objetos del inventario para dar ritmo a la aventura. Detrás de un trabajo realmente pintoresco en cuanto a escenario y personajes, se esconde una arquitectura en programación realmente avanzada. Imágenes que se animan independientemente dan una vida única a cada personaje y llevan al jugador a una experiencia visual apartada de lo casual para jugadores de otros géneros.
Broken Age es una aventura entretenida, graciosa y bien construida; con una trama atrapante y una historia que nos obliga a involucrarnos sentimentalmente con las frustraciones y objetivos de sus personajes. Un juego que sabrán disfrutar aquellos viejos gamers de la época Lucas Arts, pero que también encontrarán muy atractivo nuevos jugadores de aventuras gráficas que disfrutan de sagas como la de The Walking Dead, de Telltale Games.
El primer episodio de Broken Age llegará para PC a través de Steam el 28 de enero próximo a un costo de US$ 25. El segundo episodio se liberará en algún momento de este año como contenido gratuito para aquellos que hayan adquirido la primera parte.
Schafer, considerado uno de los padres del abandonado género de la aventura gráfica, vuelve para estampar su nombre nuevamente con un excelente videojuego al estilo de la vieja escuela, llamado Broken Age.
Surgido desde un mar de juegos colapsado de soldados y zombies donde el detalle gráfico llevado al realismo es lo que más vende, Broken Age hizo su carrera desde la nada como proyecto buscando financiación a través de Kickstarter. Double Fine, la empresa creada por Schafer en 2000, llevó adelante el proyecto y en tan solo pocos días completó su meta de US$ 400 mil para en un mes sobrepasar los 3 millones gracias a la financiación de los inversores.
Una doble aventura
Shay y Velouria son los dos protagonistas de esta aventura que respeta el viejo estilo del “point-and-click”. En ella, Shay es un adolescente hambriento de aventura que vive en el espacio en una nave que cree ser su madre y que en pos de su crianza segura lo envía en misiones inofensivas, lo alimenta y hasta lo entretiene. Pero él busca algo más. Velouria –o Vella– es una jovencita residente de un pueblo pastelero llamado Villa Sacarosa. Al igual que en muchos otros pueblos, allí se rinde tributo a Mog Chothra, una criatura de pesadillas a la cual se sacrifican las chicas más virtuosas de cada región. Al contrario de lo que piensa todo el mundo, Vella no considera esto ningún honor y cree que lo más sensato sería derrotarlo para siempre.
Bajo estas dos premisas es que comienza una historia con detalles de humor y drama, algo típico de Schafer. Intercalando entre un espacio-tiempo y otro, el jugador deberá enfrentar los clásicos retos de un juego de aventura gráfica de la vieja escuela: acertijos, puzles, enigmas y, por supuesto, las humorísticas y confusas conversaciones con personajes secundarios, otra marca registrada del género, y de Schafer.
Lo que se ve y lo que se oye
Cabe destacar que las voces están únicamente en inglés pero los subtítulos al español son posibles y, aunque algún chiste o juego de palabras se pierda en la traducción, el humor está latente en cada conversación y situación del juego. Voces como las de Elijah Wood, Jack Black o Wil Wheaton dan vida a algunos de los personajes y quien no necesite de las traducciones encontrará la ventaja de disfrutarlos.
Broken Age está dividido en dos episodios basados en el humor y las risas, pero donde el suspenso y el misterio se colará detrás de intenciones escondidas, situaciones extrañas y, sobre todo, personajes secundarios multifacéticos.
Al igual que en los juegos del recordado Guybrush Threepwood (el protagonista de la saga Monkey Island), tanto Shay como Vella se moverán dentro del escenario caminando de aquí para allá interactuando con el entorno y manipulando objetos del inventario para dar ritmo a la aventura. Detrás de un trabajo realmente pintoresco en cuanto a escenario y personajes, se esconde una arquitectura en programación realmente avanzada. Imágenes que se animan independientemente dan una vida única a cada personaje y llevan al jugador a una experiencia visual apartada de lo casual para jugadores de otros géneros.
Broken Age es una aventura entretenida, graciosa y bien construida; con una trama atrapante y una historia que nos obliga a involucrarnos sentimentalmente con las frustraciones y objetivos de sus personajes. Un juego que sabrán disfrutar aquellos viejos gamers de la época Lucas Arts, pero que también encontrarán muy atractivo nuevos jugadores de aventuras gráficas que disfrutan de sagas como la de The Walking Dead, de Telltale Games.
El primer episodio de Broken Age llegará para PC a través de Steam el 28 de enero próximo a un costo de US$ 25. El segundo episodio se liberará en algún momento de este año como contenido gratuito para aquellos que hayan adquirido la primera parte.
