Los automóviles sin choferes de
Google ya no solo podrán cambiar de carril y apurar el paso en las luces amarillas, sino también llamar la atención de los demás conductores.
Según un informe de la compañía tecnológica, sus prototipos de "
autos burbuja" están aprendiendo a tocar la bocina ante cualquier piloto distraido que encuentren en su camino. "El acto humano de tocar la bocina puede ser todo un arte, pero nuestros autos que se conducen a sí mismos aspiran a ser amables, considerados, y solo dar bocinazos cuando ayuda a la seguridad del derredor", informó Google en un comunicado.
Dichos prototipos están equipados con una bocina interna que reacciona en situaciones específicas, como un auto que está retrocediendo y no nota a otro vehículo acercarse, o como otro que intenta meterse en un carril ocupado.
La razón que los llevó a preferir una bocina interna sobre una externa en los prototipos fue para evitar sonidos que distraigan o confundan a otros conductores y transeúntes. Mientras tanto, los ingenieros de Google han registrado todas las oportunidades en las que la bocina reaccionaba apropiada e inapropiadamente para entrenar al
software. "Incluso enseñamos a nuestros vehículos a usar diferentes bocinas según la situación. Nuestro objetivo es enseñar a nuestros autos a tocar la bocina como un conductor paciente y experimentado", afirmó la empresa.