La población de los piqueros patiazules (
Sula nebouxii) ha disminuido 50% en un período de 20 años, señala un estudio publicado en la revista
Avian Conservation and Ecology que busca explicar las razones de la paulatina desaparición de estas curiosas aves de las islas Galápagos.
Estudiadas como una gran atracción por el naturalista británico Charles Darwin, estas aves miden un 80 centímetros de alto y 1,60 metros de largo con las alas extendidas. Pero lo que las hace tan peculiares son sus patas azules, un color que es indicador de salud en función de su intensidad.
Hace 17 años, un grupo de científicos notó por primera vez la presencia de diez colonias de nidos vacíos en las Galápagos. "Hasta 1997 había literalmente miles de piqueros en estos sitios de reproducción y cientos de nidos llenos de polluelos saliendo del cascarón (…). De repente, ya no estaban allí. Hubo algunos casos en los que encontramos intentos aislados de reproducción pero la mayoría no produjeron crías", dijo Dave Anderson, biólogo de la Universidad Wake Forest, Estados Unidos, y principal autor del estudio, informó
BBC.
En un comienzo adjudicaron esta disminución a un situación aislada vinculada a una serie de factores ambientales. Pero a medida que la investigación prosiguió, registraron una escasa o nula actividad reproductiva, con solo 134 aves de esta especie nacidas entre 2011 y 2013. Además, según BBC, en 2012 estimaron la población actual en 6.400 ejemplares, menos de un tercio de la única estimación anterior en 1960.
La causa
Diferentes estudios demostraron que cuando estas aves mantenían una alimentación basada casi por completo en sardinas (a las que tiene facilidad de atrapar por ser aves buceadoras) su ritmo de reproducción era óptimo. Contrario a esto, en la actualidad las sardinas representan menos de la mitad de la alimentación de los patiazules, indicó BBC.
Estas modificaciones en sus hábitos alimenticios podría ser la causante de la disminución de la actividad reproductiva. "Creemos que el factor principal detrás del declive es la escasez de alimento", dijo Kate Huyvaert, de la Universidad Estatal de Colorado.
Ahora resulta importante saber si lo que genera la escasez de sardinas es un proceso natural o la acción humana, para revertir pronto la situación actual que pone en riesgo esta exótica especie.