La artista
Catherine Nelson cree que una fotografía solo representa lo que se halla dentro del plano y eso no expresa por completo su propia experiencia con el mundo que la rodea. Por eso, decidió comenzar a sacar fotos "en otro nivel", según dijo al sitio de artes visuales
This is Colossal.
Así, la australiana sumó sus años de experiencia en el campo de los efectos especiales (trabajó en películas como
Harry Potter y
300) y comenzó a utilizar la fotografía como medio para crear mundos en miniatura.
En esto consiste su colección
Memorias futuras, un conjunto de 20 piezas en las que se observa mundos flotantes. Estos son en realidad la conjunción de cientos de fotografías, que Nelson ensambló digitalmente. Trabajó cerca de un mes en cada una de las imágenes, en las que refleja "paisajes trascendentales" y busca revelar una "profunda verdad: que es en la variedad floreciente de lo local donde reside el destino del mundo", dijo a Colossal.
La artista aseguró que no empleó efectos 3D para trabajar las imágenes, que tienen una resolución espectacular de 100x100 centímetros cada una.
Exposición
Nelson exhibirá sus trabajos próximamente en las galerías
Now, en Seúl, y
Context, en Miami.