Samsung presentará su próximo smartphone insignia, el Galaxy S6, el 1º de marzo en el
Congreso Mundial de Móviles de Barcelona, en un intento por cambiar la estrategia que le haga morder el polvo a Apple. Ya no se trata de ofrecer las más nuevas y mejores funciones sino que en los últimos meses la empresa viene demostrando un giro en su concepción del diseño y la apariencia de sus dispositivos.
La surcoreana ha enviado la invitación “Samsung Unpacked 2015, Episodio 1” con la frase “Qué es lo siguiente”, con una enigmática silueta curvada, lo que sugiere que el próximo modelo podría introducir variantes de diseño: del plano S5 a las curvas laterales del Galaxy Note Edge.
Es de esperar que también el diseño y los materiales de su nuevo S6 sean distintos, siguiendo la línea de lo que fue el
Galaxy Alpha y más adelante el
Note 4 y Note Edge, que tuvieron un borde metálico. El éxito de estas mejoras ha colocado al Note 4 como principal competidor del iPhone 6 Plus, lo que da buenos augurios para su Galaxy S6.
En la
feria tecnológica Consumer Electronic Show (CES) de este año se especuló con que el S6 iba a tener más que bordes metálicos.Una foto con un diseño similar al de los teléfonos de Samsung mostraba un chasis hecho de metal y aunque no se pudo confirmar su veracidad,
The Verge ya hizo sus conjeturas de con que saldrán dos versiones, una curva y una metálica.
Lo que importa es lo de adentro
Para un mejor funcionamiento del smartphone, puede que Samsung use su chip Exynos de 14 nanómetros en vez del Snapdragon 810 creado por la empresa Qualcomm. La razón de que la surcoreana renuncie a comprarle a esta compañía es que el procesador de Qualcomm se recalienta, además de que está creando el suyo.
La implementación de este nuevo procesador fabricado por la compañía le daría al S6 un diferencial contra el resto de los smartphones de otras marcas y se podría convertir en
una competencia interesante contra el procesador del iPhone 6.La surcoreana logró convertirse en el mayor vendedor de smartphones del mundo al ofrecer las últimas funciones, mejores que las de la competencia, en una carcasa de plástico barata. Sin embargo, ahora hay otras compañías que logran lo mismo, con mejor estética, materiales
y menor precio. Por eso, ese es el desafío que Samsung deberá enfrentar en marzo cuando presente su buque insignia, indicó The Verge.