La guerra por la supremacía entre las empresas de tecnología más avanzadas de Estados Unidos se está trasladando al lugar menos esperado: las tiendas de ladrillo.
El viernes, el éxito de Apple se desplegó en sus tiendas con las
extensas filas de clientes esperando para conseguir el nuevo iPhone 5. Mientras tanto, Microsoft, que corre para desafiar a Apple en la tecnología móvil, está ampliando significativamente su presencia comercial en las calles este año.
Por su parte Amazon, quizá el mayor ejemplo de tienda virtual, ha intentado formar alianzas con grandes minoristas, al tiempo que lanzaba su propia línea de tabletas Kindle. La compañía recibió un duro golpe esta semana cuando Wal-Mart decidió quitar los dispositivos Amazon de sus estantes.
Todo esto muestra la importancia de las tiendas tradicionales para las principales firmas de tecnología y confirman una nueva estrategia visionaria acertada de Apple.
El lugar más valioso
Hace casi dos décadas atrás, cuando Dell y otros fabricantes de tecnología comenzaron a permitir a los consumidores a pedir computadoras de escritorio y laptops personalizadas online, algunos creyeron que los días de las tiendas de computación estaban contados.
Nuestras tiendas ofrecen la mejor experiencia de compra y el mejor servicio al cliente en el planeta”, dijo el director ejecutivo de Apple, Tim Cook, durante la presentación del iPhone 5
Pero entonces Apple fue en contra de la sabiduría convencional y resurgió el espacio de la tienda de computadoras.
“Una de las iniciativas más importantes en las que jamás se embarcó Apple fue su estrategia de tiendas minoristas, que en su momento todos creyeron que era la movida más torpe”, dijo Carl Howe, jefe de investigación de The Yankee Group, una firma de análisis de compañías de tecnología.
Hoy, Apple tiene
380 tiendas en 13 países. Su tienda en la Quinta Avenida de Nueva York está entre los espacios comerciales más exitosos en el mundo, con más ingresos por metro cuadrado que Tiffany.
Apple quería controlar cómo se exhibían sus computadoras y dispositivos, y quería vendedores que supieran explicar cómo funcionaban. Las tiendas terminaron reforzando la imagen de marca, de manera que los consumidores comenzaron a pensar en Apple como un producto de lujo por sus locales amplios y modernos en algunos de los lugares más caros del mundo, dijeron analistas.
“Nuestras tiendas ofrecen la mejor experiencia de compra y el mejor servicio al cliente en el planeta”, dijo el director ejecutivo de Apple, Tim Cook, durante la
presentación del iPhone 5.