Fallout
En el universo de este videojuego existen muchas amenazas tenebrosas, pero tal vez la más temible de todas es el virus evolucionario forzado (FEV), que hace que los seres humanos se conviertan en supermutantes. El virus fue el resultado de experimentos para crear superhumanos.
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Last of Us
Una infección cerebral, transmitida a través de esporas, hace que las personas pierdan todas sus capacidades cerebrales y se transformen en una versión violenta entre un zombi y un ser humano. Lo peor: está basada en una enfermedad del mundo real que afecta a las hormigas.
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Halo
Las
enfermedades llegan al espacio en Halo. El Parásito es responsable de acabar con la vida de casi todos los seres de la Vía Láctea al propagarse por las distintas especies existentes gracias a su alta capacidad de adaptación al cuerpo que habita.
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Gears of War
Imulsión es el virus que hace que los personajes de este juego se conviertan en "lambent" o formas salvajes de su propio ser que se vuelven más agresivas a medida que el parásito toma control del cuerpo. Además, para propagarse, la enfermedad tiene la mala costumbre de hacer explotar al anfitrión.
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Resident Evil
Tal vez la enfermedad definitiva de los
videojuegos, el T-Virus fue desarrollado por Umbrella Corporation como un arma biológica infecciosa. El patógeno fue liberado más de una vez y su resultado hace que las personas infectadas se conviertan en una especie de zombi rabioso.