"Hoy en día sabemos el precio de todo y el valor de nada”, escribió Oscar Wilde. Con este mismo concepto, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, por su sigla en inglés) publicó esta semana el informe
Priceless or worthless? (“¿Sin valor o de un valor incalculable?”), una lista de las 100 especies de animales, plantas y hongos más amenazados del planeta.
La lista fue elaborada por 8.000 científicos de la Comisión de Supervivencia de Especies de la UICN. “Sin embargo, los conservacionistas temen que se deje morir a estas especies puesto que ninguna de ellas ofrece beneficios evidentes a los seres humanos”,
publicó la organización en su sitio web, donde el informe
Priceless or worthless? se puede descargar.
Entre los primeros puestos de esta nueva lista roja se encuentran especies de 48 países distintos, como el perezoso pigmeo, el correlimos cuchareta y el saola. Este último, por ejemplo, es conocido como el “unicornio asiático” debido a su rareza. Se calcula que solo unas decenas de individuos de estos antílopes viven en estado salvaje.
Todas las especies enumeradas son únicas e irremplazables. Si desaparecen, no existe cantidad de dinero que las pueda recuperar”, dice Ellen Butcher, coautora del informe
“Todas las especies enumeradas son únicas e irremplazables. Si desaparecen, no existe cantidad de dinero que las pueda recuperar”, dice Ellen Butcher, coautora del informe. “No obstante, si aplicamos medidas inmediatas podemos ofrecerles la posibilidad de sobrevivir. Pero esto exige a la sociedad su respaldo a la posición moral y ética de que todas las especies tienen un derecho inherente a existir”, continúa.
Con hermosas fotografías a color y comentarios de diferentes especialistas en conservación, el informe no solo habla sobre los problemas de supervivencia que enfrentan estas 100 especies, sino que también propone soluciones concretas para salvarlas de la desaparición.
Según IUCN, las medidas a favor de la conservación han dado buenos resultados con muchas especies como es el caso del caballo de Przewalski y la ballena jorobada, las cuales fueron salvadas de la extinción.
Simon Stuart, presidente de la Comisión para la Supervivencia de las Especies de la IUCN, escribe: “Aunque el valor de algunas especies pueda no parecer obvio a primera vista, de hecho todas las especies contribuyen a su manera al funcionamiento saludable del planeta”.