El experto alemán en seguridad de datos personales, Johannes Caspar, advirtió el domingo sobre los peligros en cuanto a privacidad del sensor biométrico de huellas del iPhone 5S, uno de los nuevos smartphones de Apple
presentados la semana pasada, y recordó que todo cuanto se captura por ese sistema se convierte en "imborrable".
"Las
huellas biométricas no pueden borrarse. Nos acompañan de por vida. Por tanto, no deben cederse por simple presión digital en un proceso de autentificación de identidad rutinario, especialmente en sistemas de almacenamiento de datos", dijo el profesor en el semanario Der Spiegel.
Las huellas biométricas no deben cederse por simple presión digital en un proceso de autentificación de identidad rutinario", dijo el experto
Caspar, responsable de Protección de Datos de la ciudad-estado de Hamburgo, rechazó asimismo el argumento de Apple de que los datos recogidos por el sistema Touch ID del nuevo iPhone quedan almacenados únicamente en el aparato de cada uno.
"El usuario corriente actual no está en disposición de controlar lo que hacen sus aplicaciones con la información que se les deposita", afirma el experto, ya que eso solo apenas está al alcance de quienes poseen amplios conocimientos técnicos.
Por otro lado, el experto sostuvo que debería primar el principio de que solo se almacenen datos cuando realmente es trascendente y necesario, no por simple "comodidad".
Las advertencias del experto ante ese nuevo iPhone se enmarcan en los recelos alemanes hacia todo aquello que atañe la preservación de los datos personales, una especie de principio sacrosanto para muchos de sus ciudadanos, menos dados a "regalar" información a las redes sociales o aplicaciones que en otros países occidentales.