El
genoma generado a partir de los restos de un hueso del pie, encontrado en una cueva en Siberia, resulta mucho más detallado que un "borrador" previo del genoma del neandertal. Este fue secuenciado hace tres años por el mismo equipo del
Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva en Leipzig, Alemania, que acaba de publicar en internet la última secuencia completa de este genoma, ahora en alta calidad.
"El genoma de un neandertal ahora se encuentra en una forma tan precisa como el de cualquier persona que camina por las calles hoy en día", dijo
Svante Pääbo, el genetista que encabeza la investigación.
El genoma de un neandertal ahora se encuentra en una forma tan precisa como el de cualquier persona que camina por las calles hoy en día", dijo el genetista Svante Paabo, líder de la investigación
Richard Klein, un paleoantropólogo de la Universidad de Stanford en California -que no participó en el estudio-, dijo que se trata de "un logro monumental que nadie habría creído posible hace 10 o incluso cinco años".
El equipo de Leipzig ha logrado determinar qué genes heredó el neandertal de su madre y cuáles de su padre. Ahora espera comparar la nueva secuencia del genoma con la de otros neandertal, humanos de la era moderna o desinovanos, otra especie humana extinta cuyo genoma fue previamente obtenido de los restos hallados en la misma cueva siberiana.
"Obtendremos una mayor comprensión en muchos aspectos de la historia tanto de los neandertal como de los desinovanos, y mejoraremos nuestro conocimiento sobre los cambios genéticos que ocurrieron en los humanos modernos después de que se separaron de los ancestros" de esas especies humanas, indicó Pääbo.
Klein agregó que las comparaciones permitirían a los científicos determinar qué hace a nuestra especie única y explicar por qué sobrevivimos mientras otros no. El grupo de Paabo planea publicar un documento científico este año.
Disponible en la red
En tanto, Pääbo dijo que la secuencia de genoma se encuentra disponible gratuitamente a fin de que científicos en otras partes del mundo puedan realizar investigaciones al respecto, un nuncio fue recibido con agrado por otros investigadores.
Por su parte, Wil Roebroeks, un arqueólogo de la Universidad Leiden en Holanda que no formó parte del estudio de Leipzig, dijo que se trata de un "momento emocionante" para los estudios comparados de humanos y nuestros parientes extintos más cercanos.