Daredevil, la garantía de Netflix

Las películas que protagonizó ese año tampoco ayudaron a su imagen. El pago y Gigli son consideradas los puntos más bajos en la carrera del actor. Pero la mayoría de los espectadores recuerdan otro filme de Affleck de ese año: Daredevil, el hombre sin miedo. En ella el actor interpretaba a Matt Murdock, un justiciero ciego provisto de habilidades sobrehumanas. El personaje provenía de los cómics de Marvel, pero en aquel entonces eso no garantizaba nada. La película fue un éxito en taquilla pero un fracaso con la crítica y terminó de sentenciar la apatía por el actor.

Doce años después, las cosas cambiaron. Affleck formó una familia con otra actriz, Jennifer Garner (su coprotagonista en Daredevil) y en 2016 se lo verá como otro superhéroe, Batman, en una película dirigida por Zack Snyder.

Además, Marvel se incorporó al conglomerado Disney y su división cinematográfica, Marvel Studios, se convirtió en un jugador imbatible en la taquilla con una decena de películas de superhéroes, aplaudidas por igual por críticos, espectadores y fanáticos de las historietas.

En 2015, la pantalla grande ya le queda chica a los estudios Marvel y la compañía se ha expandido hacia otros medios creando un universo narrativo unido por diferentes plataformas.

Poco a poco la televisión ha abierto lugar para varias series de superhéroes y Marvel no pretende quedarse afuera. En 2013 comenzó a emitir Agents of S.H.I.E.L.D en la señal ABC (en Uruguay se transmite en Sony) y a comienzos de este año estrenó Agent Carter, otra serie que mezcla espionaje con superhéroes.

Pero una de las nuevas producciones televisivas más esperadas por los fanáticos de Marvel no se verá por ninguna señal de cable, sino que su estreno está destinado a un servicio pago de streaming de video.

La compañía se asoció junto a Netflix para producir Daredevil, una nueva versión del superhéroe cuya primera temporada podrá verse a partir de hoy en Uruguay a través del servicio.

Borrón y cuenta nueva

Con el objetivo de dejar atrás la accidentalmente graciosa imagen de Affleck corriendo por los techos con un disfraz de cuero rojo, un nuevo equipo de directores, productores y actores fueron encargados de volver a Daredevil un superhéroe cool. Pero a la vez que el enmascarado debe estar la par de los populares Iron Man o Capitán América, debe mantenerse alejado de ellos.

Es que a diferencia de sus coloridos héroes, Daredevil forma parte de un rincón más oscuro y realista del universo Marvel. Creado en 1964 por Stan Lee y Bill Everett y con el diseño de Jack Kirby, la historieta Daredevil tenía como protagonista a Matt Murdock, un abogado que quedó ciego de niño pero con los otros cuatro sentidos incrementados. de manera extraordinaria. De adulto, Murdock combate la injusticia —como abogado de día y como Daredevil de noche— en el barrio de la ciudad de Nueva York conocido como Hell’s Kitchen.

Bajo esa misma premisa, los productores ejecutivos Steven S. DeKnight (Spartacus), Drew Goddard (La cabaña del terror) y Jeph Loeb (Agents of S.H.I.E.L.D) crearon la serie, presentada como un drama criminal realista.

El actor inglés Charlie Cox será el encargado de ponerse en la piel del superhéroe y de acuerdo a los avances, también dejará su sudor y sangre a lo largo de los trece capítulos que conforman la primera temporada, que promete estar más emparentada a una narrativa policial que a una de ciencia ficción.

Los otros superhéroes

Daredevil es la primera de las cuatro series que surgirán de la colaboración entre Marvel y Netflix. Actualmente se encuentran preparando A.K.A. Jessica Jones, Iron Fist y Luke Cage, también enfocadas en héroes callejeros. Tras la emisión de las cuatro producciones, sus protagonistas se unirán como un grupo en un evento televisivo bajo el nombre de The Defenders.

Mientras que Marvel descansa tranquilamente en su trono de pop y películas de recaudaciones millonarias, Netflix se ha vuelto un peleador de peso pesado en la industria televisiva gracias a series como House of Cards y Orange is the New Black.

Con Daredevil, ambas compañías verán si tienen lo que se necesita para que varios televidentes cancelen sus planes de viernes y se embarquen por los tejados y calles de Hell’s Kitchen en una odisea de 13 horas a pura adrenalina.