Usando sus tecnológicas herramientas, Curiosity analizó el suelo marciano por primera vez y halló una química compleja en su composición. “Agua y sustancias que contienen cloro y azufre, entre otros ingredientes, fueron descubiertas en las muestras entregadas por el brazo de Curiosity al laboratorio de análisis en el interior del rover”,
informó la NASA ayer.
No obstante, fue el otro descubrimiento el que generó todas las preguntas de los periodistas presentes en la presentación de la NASA durante la conferencia anual de la Unión Americana de Geofísica, en San Francisco. Curiosity encontró compuestos orgánicos simples que podrían permitir la existencia de formas de vida primitiva.
Estamos haciendo ciencia a la velocidad de la ciencia en un mundo que va a la velocidad de Instagram”, dijo el jefe científico de la misión Curiosity, John Grotzinger
“El segundo nombre del Curiosity es Paciencia”, dijo el jefe científico de la misión Curiosity, John Grotzinger, para poner un paño frío a una de las esperanzas más antiguas de la humanidad: encontrar vida extraterrestre.
Tras reconocer que existe “mucho interés” en este tema, Grotzinger dijo que es “tan raro” encontrar material orgánico fuera de la Tierra que quieren realizar un estudio profundo de las muestras del Curiosity antes de sacar conclusiones de vida marciana.
Es que los compuestos orgánicos podrían pertenecer al propio rover de la NASA y haber sido transportados desde la Tierra.
Qué y cómo se dice
A fines de noviembre, el propio Grotzinger despertó la expectativa mundial respecto a los primeros resultados de los análisis realizados por el Curiosity del suelo marciano. En una entrevista concedida a la radio pública de Estados Unidos, NPR, el investigador de la NASA dijo que
información recabada por del rover sería “para los libros de historia”.
La conjeturas comenzaron al instante y pronto los rumores sobre vida en Marte se volvieron más y más fuertes, al punto que la NASA tuvo que bajar las expectativas sobre su propia conferencia y anunciar que
todo había sido un “gran malentendido”.
Ayer, en el esperado evento, Grotzinger dijo: “He aprendido a tener cuidado con lo que se dice y aún más cuidado con cómo se lo dice”. Y agregó: “Creo que nuestro entusiasmo fue malinterpretado”.
Según el principal investigador de la misión Curiosity: “Estamos haciendo ciencia a la velocidad de la ciencia en un mundo que va a la velocidad de
Instagram”.