Existe una diferencia entre el tiempo que se mide y el tiempo real. Unos pocos milisegundos pueden valer el oro, la plata o el cobre, e incluso pueden ser la puerta de salida de la competencia.
Esta es razón suficiente para que en los Juegos Olímpicos la medición del tiempo sea crucial, sobre todo porque la tecnología con la que cuenta Londres 2012 ha logrado acercarse a la realidad como nunca antes.
Porque un sistema más complejo que el reloj se encarga de definir ganadores y perdedores, el sitio Science 360 publica una serie de 10 capítulos con videos donde profesionales explican “las maravillas de la ciencia, ingeniería, tecnología y matemática”, según explica la misma web.
“Ciencia en las Olimpíadas de verano: ingeniería en el deporte” es el nombre de la serie, esponsoreada por la Fundación Nacional de Ciencia (NCF, por sus siglas en ingles) y coproducida con el canal NBC Learn.
Allí, se explica cómo funciona la tecnología que ha sido capaz de eliminar la posibilidad de error casi en su totalidad.
Más que cronómetro
Cámaras que son capaces de sacar más de dos mil fotos por segundo, relojes, láser y computadoras constituyen el entramado de un sistema de cronometraje de alta tecnología, que garantiza la mayor precisión posible.
La unidad que más se acerca a la exactitud es el milisegundo. Con esta, se logra un resultado mil veces más preciso que un cronómetro.
Una foto de la final
En aquellos eventos donde participan muchos competidores a la vez, se emplean técnicas de medición que garantizan, por ejemplo, que la largada sea igual para todos. Así, en natación y carreras se colocan unos parlantes detrás de cada competidor, para asegurar que todos escuchen el sonido de largada. De esta forma, se evita que el corredor o nadador reaccione a la señal y no a su ansiedad.
Como refuerzo, también se ubican sensores de movimiento en el bloque de largada. Al dispararse la pistola de largada, envía una señal que activa el cronometraje y que envía una señal si detecta una largada en falso.
La fotografía de la llegada también busca ser lo más fidedigna posible: el espacio en la pantalla indica la distancia en tiempo entre un corredor y otro.
Seguidos
Un rayo láser y una cámara de alta tecnología siguen los movimientos de los nadadores y corredores durante las carreras en agua y tierra. La cámara es capaz de registrar más de 2.000 imágenes por segundo.
En ciclismo y maratones, donde es difícil seguir a los competidores uno a uno, se les coloca una etiqueta electrónica en la bicicleta o calzado, con el fin de seguir sus movimientos. En estos casos, se emplea el Radio Frequency IDentification, un sistema que envía información a antenas colocadas alrededor de la pista.
Tiempo del iPad
Science 360 también puede descargarse en forma de
aplicación para iPad desde la web. Incluye videos e imágenes en alta definición, así como la posibilidad de compartir el contenido en las redes sociales.