Los proveedores de servicios de Gran Bretaña tendrán que bloquear el acceso a sitios con pornografía de todos los hogares a menos que los clientes opten por recibirlos. Se trata de una medida promovida por el primer ministro británico, David Cameron, para ayudar a los padres a frenar el consumo de los menores de materiales inapropiados.
Cameron dijo que todos los nuevos consumidores tendrán automáticamente instalados filtros amigables con la familia y que los clientes ya existentes serán consultados acerca de si quieren instalar o no dichos filtros. A quienes no respondan, se les colocarán de todos modos.
A su vez, el primer ministro británico instó a los buscadores de compañías como Google, Microsoft y Yahoo a dar un paso adelante y dejar de brindar resultados cuando la gente busca imágenes sexuales de menores. Google, de hecho,
ya está trabajando en ello.
"Tiene que haber una lista de términos, una lista negra, que no brinde resultados a las búsquedas", dijo Cameron el lunes. "Hay ciertas búsquedas que son tan aberrantes que no puede haber ninguna duda del intento enfermo y malevolente de quien las hace. Tengo un mensaje muy claro para Google, Bing, Yahoo y el resto: tienen un deber moral".
Y fue más concreto aún: Cameron quiere que los buscadores le informen sobre sus avances para octubre. "Sé que es difícil, pero ese no es un motivo para no intentar hacerlo".