A partir del 1 de enero de 2017 rige en Francia una nueva normativa que garantiza el derecho a desconectarse fuera del horario de trabajo. Se trata de una de las nuevas medidas de la reforma laboral francesa que fue aprobada el pasado mes de julio y que despertó gran polémica.
La medida les garantiza a los trabajadores no tener que estar pendientes de su teléfono móvil o de su correo electrónico fuera de su horario laboral y, de esta forma, no dejar que el trabajo interfiera en el tiempo de descanso o cuando se está en vacaciones.
La nueva norma, que afecta a todas las empresas que tengan más de 50 empleados, busca aliviar el estrés generado por la incapacidad de desconectarse y la necesidad de estar conectado las 24 horas del día. El gobierno francés busca con esto ayudar a las empresas a regular el uso de las herramientas digitales.
Según dejó establecido el Ejecutivo francés, las condiciones deben ser negociadas entre el trabajador y la empresa. En caso de que no se alcance un compromiso entre las dos partes, la empresa deberá dejar en claro la disponibilidad que pretende por fuera del horario laboral.
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