La empresa promedio está a un mal clic, una contraseña fuera de lugar o un empleado descontento de distancia de ser hackeada. ¿Corre lo mismo para las multinacionales?
El reciente
ataque a Sony muestra que la falta de previsiones no es un problema que se relacione con el tamaño ni con el capital. Por ejemplo, los documentos filtrados de Sony revelaron que los empleados mantenían listas de contraseñas y otras datos sensibles en hojas de cálculo en sus computadoras.
Esta imprudencia alentó el último de una larga serie de ataques a grandes empresas de Estados Unidos realizados durante el año. He aquí un recuento de lo que los
hackers se llevaron con bastante facilidad.
Los daños
47 mil números de seguro social de empleados y artistas de Sony
109 millones de números de tarjetas de crédito y correos de Home Depot
83 millones de direcciones físicas y de email de JPMorgan
145 millones de datos personales de usuarios de Ebay
110 millones de números de tarjetas de crédito de clientes de Target