Apps para entrenar el cerebro

La tecnología cambia comportamientos, de eso ya no existen dudas: desde la forma de andar por tener que adaptarnos a estar atentos tanto al celular como a la calle hasta el menú diario por la infinita variedad de recetas exóticas disponibles en la web. La medicina no ha escapado a esta tendencia. Cada vez son más los especialistas que diagnostican el uso de aplicaciones móviles a sus pacientes, tanto para tratamientos preventivos como paliativos y, por qué no, curativos.

Una de las áreas que se está aprovechando de los beneficios que otorga la tecnología es la neurociencia. Existen aplicaciones dedicadas a ejercitar determinadas funciones mentales, como la memoria y la atención, que muchas veces son plasmadas en forma de juegos. El psicólogo especializado en tecnología, Roberto Balaguer, calificó a las actividades propuestas por estas aplicaciones como "gimnasia neuronal".

"En muchas de las disfunciones, la falta de uso de algunas áreas del cerebro funcionan como una vulnerabilidad; lo que hacen estas aplicaciones es activarlas", explicó el especialista.

En Montevideo existe Gimnasia Mental, un centro que se dedica a ejercicios de esta índole pero, hasta el momento, son métodos presenciales. Sin embargo, Débora Saviotti, responsable del lugar, dijo a Cromo que, con el fin de mantenerse al ritmo del avance tecnológico, han optado por desarrollar aplicaciones móviles propias que sirvan como complemento a los tratamientos y actividades que se llevan a cabo en el lugar.

Saviotti señaló que, además de tratar las funciones del cerebro, estos programas sirven también para mejorar la autoestima de la persona, ya que esta se va proponiendo metas y va acumulando logros.

"Quienes logran incorporar su uso como un hábito van a estar buscando mejorar sus puntuaciones. Hay un componente de gratificación, de autoconfianza, de autosuperación", afirmó.

Entre las disfunciones que pueden tratarse con estas aplicaciones está la dificultad en la lectura o en la atención, que principalmente afecta a niños. En estos casos, el software ayuda a que el paciente se focalice en ciertas áreas del texto para no saltearse palabras, letras o renglones. Muchos de estos programas incluso tienen seguimiento de movimiento ocular, que miden la capacidad de lectura del usuario. Para la dislexia, por ejemplo, existe Piruletras.

La tercera edad también aprovecha estos avances con el uso de aplicaciones que la ayudan a ejercitar la memoria, la percepción, el tiempo de reacción, la motricidad fina y la coordinación, entre otros.

El trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por su sigla en inglés) es uno de los síndromes que pueden ser tratados a través de este tipo de tecnologías. Project Evo es un ejemplo de esto. Se trata de una aplicación diseñada específicamente para este tipo de trastornos, cuyo concepto fue desarrollado por un grupo de neurocientíficos.

El jugador debe dirigir el vehículo acuático de su personaje a través de un paisaje congelado, el cual contiene ciertos obstáculos que se deben superar. A medida que se avanza, comenzarán a saltar peces de distintos colores por encima del vehículo, pero solamente se debe intentar atrapar a los rojos. Tal vez parezca sencillo, pero con tantos factores en los que concentrarse a la misma vez, el juego termina siendo un gran desafío, incluso para aquellos que no sufren de déficit atencional.

Según un artículo publicado en el sitio NPR, lo que sucede al jugar es que las redes neuronales que se encargan de controlar la multitarea se superponen con las que se encargan de controlar la memoria y la capacidad de atención. De esta forma, las partes del cerebro que se fortalecen son las relacionadas con las habilidades cognitivas, mientras que las que están asociadas con los desórdenes se relajan y entran en desuso.

Matt Omernick, uno de los diseñadores este juego, ya había trabajado por un tiempo en Lucas Arts, el estudio responsable de la saga de Star Wars, produciendo los juegos para esta franquicia. "Las cualidades de un videojuego, las cosas que te atrapan, lo que hace que el cerebro actúe, puede ser un perfecto recipiente para la medicina", dijo al medio estadounidense.

Para Balaguer, el diagnóstico de aplicaciones móviles por parte de especialistas tiene más ventajas que desventajas. Primero que nada, por la inteligencia intrínseca en ellas y su capacidad de adaptación. La gran mayoría de estas aplicaciones realizan una prueba diagnóstica al usuario para determinar su estado mental, los déficits y fortalezas, y, a partir de esos resultados, brindar actividades que se adapten a las posibilidades y necesidades de cada uno. "Es muy difícil que haya algo que no sea digital tan capaz de adecuarse a las posibilidades del usuario, porque está leyendo permanentemente los logros y las dificultades", opinó Balaguer.

Por otro lado, el especialista destacó la accesibilidad al tratamiento: una aplicación móvil puede utilizarse en el lugar y el momento en que desee el usuario. Otra ventaja: el carácter lúdico de estos programas, que hacen que el usuario no se dé cuenta de que está realizando una tarea terapéutica.

Saviotti coincidió con Balaguer en este sentido: "Todo lo relacionado con la parte emocional, el placer de jugar, la reivindicación de lo lúdico como forma de aprendizaje y el hecho de acceder a formas prácticas que son inmediatas, a demanda, que son usadas cuando la persona quiere utilizarlas, en vez de estar esperando por un curso", opinó la docente.

Entre las desventajas que expuso Balaguer está la falta de un seguimiento por parte del médico, ya que el uso de estas aplicaciones depende exclusivamente de la voluntad del usuario.

La responsable de Gimnasia Mental halló como una desventaja el riesgo de la adicción y del uso abusivo de la tecnología. Además, carecen de ventajas en lo que respecta a las habilidades de socialización y de trabajo en equipo.

Según Balaguer, el uso de aplicaciones móviles con fines terapéuticos, al menos en Uruguay, es un área que aún no ha sido totalmente explotada. "Es un gran complemento a los tratamientos y herramientas a las cuales el usuario puede acceder todos los días", señaló. Además, el especialista afirmó que, al igual que con la gimnasia para el resto del cuerpo, el cerebro precisa de una especie de gimnasia preventiva para mantenerse saludable.

"A nivel cognitivo eso todavía no está instaurado. La gente no tiene muy claro que al cerebro hay que tenerlo en acción para que no empiece a decaer. La edad y el deterioro es parte de nuestra vida y es ineludible, pero lo que uno puede hacer es tratar de paliarlo", indicó.

Las herramientas provistas por el avance de la tecnología ofrecen a la medicina posibilidades ilimitadas en lo que respecta al tratamiento de disfunciones que requieren del esfuerzo del paciente. Si queda alguna duda respecto de esto, solamente hay que mirar hacia Inglaterra, donde la cadena televisiva Al Jazeera entrevistó a Alika Agidi-Jeffs, un músico londinense. Este muchacho fue diagnosticado con trastorno bipolar, una enfermedad que provoca que la persona tenga cambios bruscos de temperamento, depresión y sobreexcitación.

Un grupo de investigadores del Instituto de Psiquiatría, Psicología y Neurociencia en el King's College de Londres encontró la forma de tratar su condición mediante el uso de la realidad virtual. Lo que proponen es inducir los síntomas del desorden del paciente mediante situaciones que estos puedan considerar estresantes y ayudarlos a sobrellevarlos, pero en un ambiente seguro y controlado.

Con la tecnología disponible las oportunidades son infinitas. No sería raro que, en un futuro, su utilización llevara a la disminución en los costos de ciertos tratamientos para los que se requería un gran componente de recursos humanos. El desafío solamente está en la forma de presentar los contenidos con el fin de hacerlos más atractivos al usuario, y el límite de esto es la imaginación.

Trastornos tan serios como el autismo también han causado que miles de especialistas aprovecharan las bondades de las aplicaciones móviles para su tratamiento. Según dijo al sitio Parenting Mark Mautone, presidente de un centro de tecnología integrada para personas con este trastorno, esto es gracias a que varios estudios han demostrado que las tabletas y los teléfonos inteligentes han tenido un gran impacto como tratamiento complementario en lo que respecta a las habilidades de aprendizaje y comunicación de los niños con este desorden.

"La clave para encontrar la aplicación que mejor se adapte a cada niño no es buscar en la App Store aplicaciones con el nombre del desorden, sino aquellas que trabajan sobre esa habilidad que se pretende ejercitar", señaló Mautone. El especialista dijo que para encontrar la aplicación apropiada deben tenerse en cuenta cuatro factores: el conocimiento del desarrollador sobre el área para la que la aplicación fue diseñada, la calificación de la aplicación, la facilidad en el uso y la funcionalidad.

Dos aplicaciones recomendadas son iSecuencias y AbaPlanet. La primera está enfocada en ayudar al niño a ejercitar las áreas del lenguaje o las emociones, mientras que la segunda se enfoca principalmente en el vocabulario y las formas de los objetos.