Las primeras ofertas por las patentes tecnológicas de Eastman Kodak están muy por debajo de los US$ 2.600 millones que busca recaudar la empresa de servicios fotográficos, según informó
The Wall Street Journal.
Kodak ha recibido dos ofertas que enfrentan a dos gigantes de Silicon Valley, la tecnológica Apple y el buscador Google, de cara a la subasta que se celebra este miércoles, según detalla el diario financiero, que precisa que el ganador se conocerá el 13 de agosto.
Las ofertas de los dos grupos inversores que hay encima de la mesa son por entre US$ 150 y 250 millones, según el diarios.
La quiebra de un innovador
Kodak, que se declaró en quiebra el pasado 10 de enero tras verse obligada a acogerse al Capítulo 11 de la Ley de Bancarrotas de Estados Unidos., inició hace un año el proceso de venta de su más de un millar de patentes tecnológicas para digitalizar imágenes.
Entonces, la firma dijo que las patentes despiertan gran interés por el uso que se le pueden dar en teléfonos inteligentes y otros dispositivos móviles, y dijo que los analistas estimaban que su valor podría superar los US$ 2.000 millones.
"El proceso de subasta, incluida la información sobre las ofertas y la identidad de quienes hacen las ofertas, es confidencial por orden del tribunal de bancarrotas", dijo un portavoz de Kodak, para quien especular con los detalles es "inapropiado".
El proceso de subasta, incluida la información sobre las ofertas y la identidad de quienes hacen las ofertas, es confidencial por orden del tribunal de bancarrotas", dijo un portavoz de Kodak
El periódico detalló que la venta de las 1.100 patentes se está haciendo en dos lotes, un portafolio relacionada con la captura y procesamiento de imágenes, y otro relacionado con su almacenamiento y análisis.
En junio pasado Kodak presentó una demanda en Nueva York contra el gigante Apple para que no interfiera en su venta de patentes, desinversiones que necesita para seguir adelante con su plan de reestructuración para salir de la bancarrota.
Kodak se declaró en quiebra por su incapacidad de competir en el mercado digital, para intentar reforzar su liquidez, rentabilizar la propiedad intelectual no estratégica, resolver la situación de los pasivos y concentrarse en negocios más competitivos.