Si Adán pecó, ¿qué culpa tengo? ¿Es sostenible aún la doctrina del pecado original? ¿No está en contradicción con los últimos hallazgos de la ciencia? Estas son algunas de las preguntas que deja abierta
Aleteia, una nueva red social católica que pretende incentivar el diálogo entre creyentes de todas las religiones e incluso entre no creyentes.
La nueva herramienta de interacción fue lanzada el jueves por la Fundación para la Evangelización a través de los Medios (FEM) en Roma.
Su presidente, el español Jesús Colina, fundamentó la iniciativa en que cada mes se suceden cerca de 55 millones de búsquedas en Google referidas a Dios, 25 millones a Jesús, 37 millones a la Iglesia y 17 millones a la palabra “amor”.
Colina dijo que la nueva red social ofrecerá las mejores producciones de instituciones y medios de comunicación católicos de todo el mundo y que ha sido creada “como respuesta” al llamamiento hecho por Benedicto XVI para la nueva evangelización en el mundo digital.
Según agregó, Aleteia, no pertenece al Vaticano, pero cuenta con el patrocinio de los Consejos Pontificios para las Comunicaciones Sociales y para la Promoción de la Nueva Evangelización.
Hasta el momento, Aleteia cuenta con 1.041 miembros entre sitios de internet, radios y televisiones católicas de todo el mundo.
Distinto pero similar
Aunque alejada conceptualmente de otras redes sociales como pueden ser Facebook o Twitter, Aleteia, ofrece una serie de servicios interactivos que van desde la creación de contenidos hasta la posibilidad de realizar donativos.
En una primera instancia, Aleteia está disponible en seis idiomas, español, portugués, italiano, árabe, inglés y portugués. Sus contenidos son coordinados por un equipo de 45 personas, repartidas en todo el mundo, entre redactores, traductores y expertos religiosos.
Su comité editorial está formado, entre otros, por Rafael Navarro Valls, catedrático de la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense de Madrid, y Jaime Septien, director del diario católico mexicano El Observador en línea.